viernes, 6 de septiembre de 2013

Incierta inseguridad de viernes

Esta tarde el monstruo del miedo a perderte se ha atrincherado en mi mente y me está haciendo la guerra. Y sé que es absurdo. Que no te poseo, que no eres mía. Pero a pesar de ello ese miedo sigue ahí. Y sé que sigues conmigo por tu propia decisión, y que nada te ata o te obliga a estarlo.
Qué curioso y contradictorio es esto del amor…
Lo mismo te transporta a ser el más dichado, como te condena a la peor de las torturas, y no por eso resulta menos placentero.
Te conozco, y cuanto más te conozco más me gustas, y cuanto más me gustas más te quiero conocer, y al mismo tiempo crece en mi el miedo al desconocimiento.
La curiosidad mató al gato, y después al humano.
Hay cosas que es mejor desconocer.
Hay ladrones capaces de abrir cualquier cerradura,
así como llaves en manos de maestros que también lo pueden hacer.
Si tu querer no tiene único dueño.
Cómo asegurarme que no nos vamos a perder….

Hoy, sin saber por qué, me desperté junco. Frágil observante a orillas de la rivera del arroyo de vida. Bien seguro de la incertidumbre de mi capacidad de aplacar el voraz apetito de ese monstruo que hay que alimentar día tras día, y del cual quizás no queden las suficientes reservas para mañana. Corredor de una carrera al que pueden sobrepasar en cualquier momento unos metros antes de la meta. Frágil contigo y hueco sin ti. Junco a la merced del viento. Incompleto e imperfecto en tu a veces ausente presencia. Incapaz de llenar todo el inmenso hueco de tu persona. Y todo ello me asusta porque me llevaría a estar vacío de nuevo sin ti.

martes, 30 de julio de 2013

24 son muchas horas para volverte a ver

Fragmentos de una noche sin luna ni estrellas.

Me he quedado vacío

su fragancia y su risa, que hasta hace un ratito inundaban mi cuarto se van desvaneciendo

Y alucino imaginando, que si pongo mucho cuidado, puedo escuchar perdidos ecos de su aun viva voz atrapados entre estos muros. Y los rebusco en silencio como melodía que se resiste a mostrarse al compositor. Desvarío con que alguno quedase atrapado entre las sábanas, y esta noche, antes de abandonarme al desensueño sin su cuerpo, me susurrase: te deseo

Acaricio mi nuca y mi mejilla, creyendo, que con mis dedos aun podré recuperar el aroma y el néctar que sus besos olvidaron en mi piel para que esta noche no duerma con el corazón frío. Esta boca, insaciable del sabor de su ser y su saliva, ha iniciado una estricta huelga de celo. Ningún alimento igualaría el paladar en su cielo. En cómo la devoraría esta noche se pierden sus anhelos.

Huérfanos sin los suyos quedarán mis pies de madrugada. Tristes en ausencia de los cálidos abrazos en los que tanto les gusta entremezclarse en ti. Y mis manos… las pobres, protestan de nuevo. No se aguantan más otra noche sin la suavidad de su pecho. Dormir en él, sentir la música de su palpitar en sus propias yemas es el mejor baile al que jamás han sido invitados. La almohada siempre renqueó en esta danza.

Me rodeó la oscuridad, la ausencia de su luz me sumió en sobresaltado desvelo. Mis pupilas, incapaces de captar imagen alguna que no pinte su color, irremediablemente se rinden al blanco y negro.


y en esta noche, la misma oscuridad que me acompaña, supongo que también lo hará con ella, y sus miedos y mis miedos serán los mismos… diría que únicos… y hasta puede que dirigidos por un mismo corazón decapitado en el espacio entre nuestro lecho.

by Anticronista G.

lunes, 29 de julio de 2013

Carta abierta para mi.

Querido Anticronista:
                Sé que siempre creíste que sólo en las noches de luna llena era en las que se activaba la máquina del tiempo. Pero hay veces que en el universo, y a causa de otras extrañas alineaciones estelares, ésta recobra vida propia y te transporta a sus caprichosos momentos pretéritos.
Sabía que había de llegar el día en que esta carta a mi llegaría, así que omniscientemente te digo que para nada me ha impresionado.

También sé que estás barajando -sobre aun inciertas casualidades vitales- que puedes estar –por así llamarlo- infectado de algún tipo de enfermedad poco común, y así te lo vengo a ratificar. Has estado dando tantas vueltas en el mismo bloque que ya sus paredes confundes circulares. Has tropezado tantas veces en la misma piedra y no te has dado cuenta que el camino es una calzada romana. Siempre derrapando. Siempre desbocado. A veces sin control. Siempre sin control. Siempre… Seamos honestos en esta carta.
Hace un rato te preguntabas:

NO entiendo. Si mi amor y cariño es tan sincero, continuo e intenso como el tiempo, ¿por qué asusta tanto a quién lo entrego? Quizás sea un romántico enfermo de sentimiento y aun nadie ha inventado este desorden. Jamás me enseñaron como tenía que dosificarlo, y volviendo la vista atrás, hacia los cruces de caminos… tampoco quizás yo haya aprendido.

Has trotado siempre tan deprisa… como si el camino no tuviese final… ¿qué meta querías alcanzar? sólo rectas que trazar. Los extremos no son buenos para nada.

 Apéate del camino por un ratito y párate a reflexionar. Toma aire. Déjate relajar. Y mira el camino, tan cerca del origen como puedas, y tan lejano del final como atisbes a ver. Quizás sea un buen momento de cambiar, no sé, probar cosas como:  ser un poco más paciente, quizás introvertido, menosmanifiesto, pausado, relajado… ¿Qué se yo… ? Algo distinto… Así podrías tener elementos de juicio con los que quizás pudieses ratificarte en tus creencias justa y menos obstinada o egoístamente.

De lo que respondió:
Pero por ahí soy así, por suerte o  para desgracia. ¿No lo recuerdas bien en el futuro? A día de hoy no he visto muchos casos de personas que cambian y no sé si yo estaría entre uno de esos excepcionales seres –que cambian a mejor, claro. Y si bien no me falla la memoria, esta conversación ya la habíamos tenido antes con iguales resultados. Sí. Funciona durante un tiempo, pero al final el ser termina destilando por su esencia. ¿Falta de constancia? ¿Falta de herramientas? ¿Falta de motivación? Quizás. No tengo más experiencia que mi vivencia actual. Sinceramente no te podría responder. Me gusta la persona que soy. No cambiaría ahora mismo ni un ápice de mis equivocaciones si por ello no fuese la persona que soy. ¡¡Ojo!! No te digo que aquí me vaya a quedar. Espero tener una vida larga y saludable -en todos los aspectos. No sé desde el futuro cómo lo verás.

Recuerdo un día que Marcelino, ante un problema de esos que parecen existenciales me dijo que siempre tenía que ser yo. Nunca fui bueno piropeándome, pero en sus palabras fue la palabra auténtico la que me cautivó. Me sedujo esa libertad que me transmitió de no tener que ser como los demás. Mientras no se dañase/incomodase a nadie me apresuré a añadir mentalmente al postulado. Y me gustó. Lo creí. Y quizás por eso a día de hoy te esté escribiendo desde esta precisa ubicación.

¿¿¿¿Por qué no hacer?, decir?, sentir?, vivir?... lo que uno desee en cada instante de su vida? ¿Porque no es la norma? ¿Está socialmente mal visto? ¿Fuera del protocolo?... ¿Y quién eligió todo lo anterior? Porque yo no lo fui a votar.

 Creo que la vida está hecha para sentir, lo bueno y lo malo. Porque eso nos distingue de los muertos. Ellos no sienten. Por tanto, sentir debería ser un objetivo vital, y parece que es un valor en declive. Y alguien por ahí le añadió, que para que una vida fuese 100% plena, la buenas y malas vivencias habían de autoequilibrarse mutuamente en una balanza.
Estoy de acuerdo con usted en algunas cosas, pero en otras no tanto. Nos vemos en el siguiente eclipse en Venus. Cuídese que la edad no perdona. ;)

Y así es como concluyó mi primera conversación con mi ser pasado. Los eclipses en Venus son cortos y esos veranos suelen bonitos, cálidos y largos.


by Anticronista Del Mañana

sábado, 27 de julio de 2013

La enfermedad amorosa

Bendita enfermedad esta del amor sin cura, píldoras mágicas ni prescripción médica. De la que uno se contagia en el momento inimaginado, de duración variable -con casos en los que uno nunca se recupera- y de rehabilitación dura.
Remueve, reestructura, desestabiliza y remodela nuestro yo. Truca la balanza de nuestros juicios. Intermedia en creencias, asunciones …
Edulcorante inductor de las más febriles locuras, dicotomías, pensamientos y sentimientos contrapuestos. Apertura y aceptación a la vulnerabilidad, al ser heridos, a sentirnos un poquito más frágiles evitando volverse demandantes dependientes.

Curioso tema para un manual de psicología, roca golpeante en pensamientos de filósofos,  caso para la neurociencia y quizás sociología.

By Anticronista

Lo que me gusta de ti

Cosas que me gustan de ti:
Como te enroscas en mi después de hacer el amor
como aparentemente sin motivos me dedicas una de tus más cálidas sonrisas
cuando me haces sentir importante para ti en preocupaciones
tu alocada espontaneidad
cada una de tus pequeñas manías y malas perversiones
tu sinceridad
tu predisposición a mis caricias y besos
mi sorpresa ante la veracidad de alguna de tus alocadas predicciones
como ocupas cualquier recoveco entre las extremidades de mi cuerpo para acurrucarte en mi
tu manera de entender la vida
tu complicidad
tu libertad
tu independencia

Cosas que no me gustan de ti:
.

lunes, 1 de julio de 2013

Tintes de odio en autocompasión.

Taciturno, desazonado, febril, inútil y doloroso juego del odio
¿por qué a quien gustamos de nosotros gusta, no?
¿por qué no gustamos de quien gusta nos?
¿Quién en su sano juicio en estulto día me convenció
de que lo difícil casi siempre es lo mejor?

¿Por qué se hace difícil encontrar cabos sueltos en el amor?...

¿Y qué sé yo si soy un iluso?
un completo analfabeto emocional
un pasajero que lleva toda su vida barado en la terminal
y cada estación que pasa
me invento, reintento y reviento aun si cabe más
Y cada derrota es ya victoria
algunas me temo aun me aguardan por luchar…
más…
otra distinta cara oculta en la luna que me permito el contemplar…

Y no aprendo, no
para qué lo voy a negar
es tanto el conocimiento como astros por visitar
que no me alcanzaría todo en un mismo tiempo abarcar…
y sigue el astrónomo de praxis de corta vocación obstinado en aullar.

Y en teoría es simple
más no se pueden unir todas las estrellas con una única traza
lo que unas veces el corazón engorda
la ortiva razón aparece y lo adelgaza. (remata)

Por: Anticronista Gutiérrez

martes, 18 de junio de 2013

Necia cegera

Y no te das cuenta...
y continúas habitando ese loco mundo
donde las mariposas acometen al león
y aun así
sigues ciega...
insensible e inmutable
como larva que se encerró en su capullo
y que sin quererlo ni ser consciente
ya despertó crisálida...
Y los espejos te mienten
mientras buscas tu reflejo
en los ojos de los grises,
de los mediocres...
y no recibes más que una imagen
que te distorsiona,
te confunde
y como león que venciste
te puede, acorrala y te somete.

Abre los ojos
mira las chispas que desprende el acero
sin golpearlo,
sin violencia,
sólo con tu roce
haces que vuelva a las entrañas de la tierra
como instinto animal
que regresa a la cópula que lo engendró
Fuente de sentimientos,
es una lástima que aun sigas sorda,
inmutable y a veces caduca
pero revoltosa como la primavera
tras un invierno de aletargo.
Abre los ojos!!
Abre los ojos!!
Y deja de una vez
que el sol que yace en mi pecho
a despertar del invierno te tiente.

By Anticronista Gutiérrez

viernes, 24 de mayo de 2013

Metílicas reflexiones

El tiempo es el único que nos marca cual res y nos deja escapar para volver a marcarnos de nuevo cuando menos lo esperamos. Y digo esto porque realmente no somos conscientes del paso rápido y firme de la cuenta atrás. De lo que dejamos atrás, de lo que nos queda por vivir, y lo más importante…  que no somos más que polvo -de estrella apuntarán algunos-  renovado, reestructurado en enlaces químicos, conexiones bioléctricas… que un día al polvo volverá, y que nadie atina a explicar cuan día tomamos eso que sin equivocarme atinaría a llamar “subjetiva consciencia de la realidad” para pasar a creernos entes que vivimos una vida intentando controlar la realidad que irremediablemente se nos escapa unos pasos más adelante.  TIC TAC, TIC TAC. Mientras escribo esto y tú lo lees seguro que no somos conscientes que la cuenta atrás continúa su marcha. Que lo que un día dejamos de hacer quedará perdido en otros mundos, universos o realidades. Que no hay dos días iguales por más que las circunstancias sean las mismas… y que mientras seguimos en esta espiral de intento de autocomprensión, el tiempo fluye, como un río, y como bien apuntó Machado en su día, en cualquier momento llegaremos al mar. Que cualquier decisión que tomamos hastía nuestra vida entre lo que pudo y lo que es. Y mientras no cesa el tic,tac,tic,tac… No atinamos a pensar que no hace tanto tiempo nuestro padres se encontraban en la misma encrucijada de vida en la que nosotros nos encontramos, y que en menos que un gallo canta, llegaremos a esa misma meta vital.
Y podremos devanarnos la cabeza, pensar y filosofar, creer atinar en cual es el sentido de la vida, de dónde somos, determinismo, indeterminismo, razón, espíritu… y ¿para qué? ¿Qué ganaríamos si tuviésemos la capacidad de responder a esas preguntas? ¿acaso haría este camino menos pedregoso? ¿podríamos evitar los baches a los que todos hemos sido injustamente predestinados a tropezar? Pues NO. Porque si piensas un poco, vivir es equivocarse, es luchar por una esperanza muerta, una meta perdida, un camino con origen y destino incierto, pero cierto destino a su vez. Y para nada nos sirve compararnos, medirnos o igualarnos. Somos como las burbujas de un vaso de cerveza. Unas más grandes, con más o menos gas, con menor o mayor velocidad de ascenso, pero todas siguiendo un mismo patrón de ascenso hasta una superficie que nos explotará. Habrá burbujas que se dividan dando lugar a otras burbujas, otras que se unirán para ascender como tan sólo una, pero cualquiera de las posibles combinaciones, todas alcanzarán el mismo cielo. Por eso el día que no recuerdes, que no aprendas como consecuencia de una equivocación, que no compartas y crezcas… será como ese boleto de la quiniela que desprecias a la basura por no haber sido premiado. E incierto no es que la vida es una lotería presa del azar, pero al menos a mí, a día de hoy, me gustaría poder tener a buen resguardo cada uno de esos boletos que aposté, y aunque no fueron premiados, en su momento representaron una gran ilusión.
Y otras generaciones, cuerpos, mentes… con sus inquietudes e ilusiones volverán a pisar la misma tierra que hoy nosotros pisamos. Volverán a reconstruir entre las ruinas que dejamos. Moldearán y volverán a jugar, volverán a apostar por esto que llaman vida y de la que todos salimos como perdedores porque no existe ningún premio que reclamar. Y así continuará el bucle de la vida. Personas que reemplazarán el papel que otros dejaron en esta pantomima de teatro que gira, y gira, y gira… y no se marea, y no se detiene. Nunca para la rueda.

Y en el fondo nuestra vida es así. Por más que creamos que sabemos, siempre podremos volver a tropezar. Por más que el camino nos resulte familiar siempre habrá bifurcaciones que nos confundirán, piedritas que a sorprendernos volverán y caminos cortados que nos atajarán. ¿Y quién sabría decirme qué es la vida?

by Anticronista Gutiérrez.

lunes, 20 de mayo de 2013

Así como te sueño esta noche


Entras en mi imaginación y me pierdo
se queda el tiempo a tu merced rendido…
me ausentas sin desearlo ni saberlo
y me das el cobijo de tu cielo prohibido

Aun no sé si al alba te soñé despierto,
o sin tu sonrisa he malvivido dormido

Y brotas de mi ser en palabras que te buscan
sentimientos presos en este castillo sin llave
si en mis noches tu brisa ladrona me limpia de bruma
provocando a mi boca y dejando que estalle

Pensamientos, ¡no quiero que de su recuerdo huyan!
mientras la vida no se extinga y al fin ya me calle. 

by Anticronista Gutiérrez

lunes, 13 de mayo de 2013

Brisa caprichosa.

Leve y frágil pasajero de tiempo
de sencillo viaje; sin balijas, sin destino...
rieles que parten de estación Tormento
colmado en espacios de ausencia vacíos.

Como suave brisa que acompaña al viento
no tengo prisa, no existe camino...
anhelo caricias, enredarme en tu pelo
rozar tus labios susurrando a tu oído:

- Y si no hay presente que se conjugue ahora y contigo
no quiero seguir más el camino del viento.

- Quiero ser libre y a la vez tu cautivo.

Quiero que me exhales, que me respires...
que me vacíes de oxígeno por castigo.
morir si es preciso consumido en tu aliento
y ganar de nuevo el cielo; a tu boca rendido.

Dejar de ser brisa, convertirme en viento
atacar con tormenta tus campos marchitos
huracán que tumbe mil prisiones de hielo
y sonido que como el trueno alcance tu oído:


- Y si no hay presente que se conjugue ahora y contigo
no quiero seguir más el camino del viento.

- Quiero ser libre y a la vez tu cautivo.

de: Anticronista Gutiérrez.

martes, 12 de febrero de 2013

Oda desnuda a la flaca.


Ay flaquita de manos de seda
de profunda mirada de dorado olivar
con sonrisa que me ensancha las venas
y de ausencia que a mis ojos incita sangrar

Tu locura es el orden del caos
ya es afluente tu aroma en mi respirar
tu alegría y viveza prenden fuego a mis manos
conocida ya fábula vieja que me acompaña a soñar.

Y son fugaces paraísos tus furtivas visitas
tan esperado combustible de esta nave especial
deseado viaje con inicio sin fecha ni puerto
incógnita aventura, desconocido final…

De ese cálido sueño de mundos entrelazados
con estrellas fugaces por descubrir entre tus cabellos
constelaciones por dibujar ceñido en tus brazos
universo lascivo en que se pierde mi cuero.

Y si he de perderme, ya no quiero mapas…
desprecio a la muerte en tu profundo deseo
mi meta algún día morir de tus labios
camino al abismo con paso certero.
By Anticronista Gutiérrez.

jueves, 7 de febrero de 2013

Poesía del día:

CUANDO ESTÉS VIEJA 

Cuando estés vieja y gris y soñolienta 
y cabeceando ante la chimenea, toma este libro, 
léelo lentamente y sueña con la suave mirada 
y las sombras profundas que antes tenían tus ojos. 

Cuántos amaron tus momentos de alegre gracia 
y con falso amor o de verdad amaron tu belleza, 
pero sólo un 

hombre
 amó en ti tu alma peregrina 
y amó los sufrimientos de tu cambiante cara. 

E inclinada ante las relumbrantes brasas 
murmulla, un poco triste, cómo escapó el amor 
y anduvo en las cimas de las altas montañas 
y entre un montón de estrellas ocultó su rostro



- William Butler Yeats

miércoles, 30 de enero de 2013

Apócrifos de Corazón

Aunque no lo creas,
y aunque no te parezca,
aunque las agujas del reloj
ya sean cansadas de tanta vuelta...
A pesar del tiempo y aun y así...
... sigo muriendo en vos.

Aunque nos separe un mar de calamidades...
aunque no nos moje la misma lluvia
ni nos ilumine la misma estrella...
aunque los caminos de nuestros destinos
no se crucen entre tanta distancia incierta
Aunque aun y así, diciéndotelo, no te lo creas
no consigo olvidarme de vos.

Mas si cien siglos durase
la vida sobre esta funesta tierra
ni si cien distintos mares desgastasen
esta ya olvidada piedra
y si el agua nace del río,
para regresar de nuevo a su guerra
mientras siga pensando y viviendo en vos
ojalá y no cese nunca
esta ya no tan indeseada tormenta.

by Anticronista Gutierrez