vacilando ante el olvido y añorando tu presencia.
Inquietado por tus sueños,
desvelados por ese perfume del que tiñó mis aun incipientes canas.
Adaptándome a esta áspera libertad
no aun por mi lo suficiente deseada y apreciada
y suspirando por ti desde el más hondo y oscuro poro
en que me has convertido la alcoba del alma.
By: Anticronista Gutiérrez
No hay comentarios:
Publicar un comentario