"Y así es la vida, muñeca rica, por un lado nos da y por otro nos quita..."
lunes, 30 de abril de 2012
martes, 24 de abril de 2012
El Valle de los Desensueños
Sueño de entresueños
de este universo ya nada imposible
fuego de estrellas
calor que todo resiste.
De estrellas sueños polvos somos
Sueños nacidos en la misma luz,
el mismo fuego y con mismo destino seguido
Sueños que me llevan loco
sueños que me juegan contigo.
Cuando el sol se va y me falta tu luz
entonces, sólo entonces...
yo sueño que sueñas conmigo.
Destino de ensueño soñé
ensoñado en un mismo camino
en profundo valle despierto me hallé
porvenir... desensueño sin ti vacío.
Y si sueño contigo
mi vida daría por saber si tu también sueñas conmigo
Si fuera de mis sueños te contemplo amanecer
Mundo de ensueño...
dessoñado destino....
Dime amor, ¿también tu sueñas aun conmigo?
de este universo ya nada imposible
fuego de estrellas
calor que todo resiste.
De estrellas sueños polvos somos
Sueños nacidos en la misma luz,
el mismo fuego y con mismo destino seguido
Sueños que me llevan loco
sueños que me juegan contigo.
Cuando el sol se va y me falta tu luz
entonces, sólo entonces...
yo sueño que sueñas conmigo.
Destino de ensueño soñé
ensoñado en un mismo camino
en profundo valle despierto me hallé
porvenir... desensueño sin ti vacío.
Y si sueño contigo
mi vida daría por saber si tu también sueñas conmigo
Si fuera de mis sueños te contemplo amanecer
Mundo de ensueño...
dessoñado destino....
Dime amor, ¿también tu sueñas aun conmigo?
Por: Anticronista Desvelado
viernes, 20 de abril de 2012
Fragmento: Amor en los tiempos del Cólera
Por favor, permíteme empezar de cero. La edad no existe más que en el plano físico. La esencia del ser humano resiste el paso del tiempo. Nuestra vida interior es eterna, lo que significa que nuestro espíritu sigue tan joven y vigoroso como cuando estábamos en la flor de la vida. Piensa en el amor como en un estado de gracia, no un medio para nada, sino un origen y un fin. Un fin en sí mismo.
Gabriel García Márquez.
Fragmento de: Platónico
"bajó la ventana
y me besó en la mejilla,
y se alejó.
bien, como dicen:
el sexo no lo es todo.
también está el alma.
regresé a mi lugar
y comencé a buscar la
mía."
Charles Bukowski
Javier Sánchez - Uno
Sé como te sientes.
Mis sentimientos aun son los mismos. Están fundidos con el cristal que contuvo tu reflejo en mi desde que nuestras miradas se encontraron.
Si lo deseas me encantaría acogerte de nuevo entre mis brazos,tan sólo necesito oír tu llamada,
ya nada hay en este mundo que me importe,
mi músculo de amor prenderá de nuevo...
esta llama eterna no hay ya quien la apague...
tu ausencia que me quema y arde por dentro
aun tengo una vida entera para esperarte ...
Si no es la tuya, no quiero la de nadie.Debes saber que tienes cautiva mi razón
y no quiero dar a nadie más de beber de su amor que no seas TU.
Anticronista Gutiérrez
Alma Pómez
Viviendo con tu falta, acostumbrándome a tu ausencia,
vacilando ante el olvido y añorando tu presencia.
Inquietado por tus sueños,
desvelados por ese perfume del que tiñó mis aun incipientes canas.
Adaptándome a esta áspera libertad
no aun por mi lo suficiente deseada y apreciada
y suspirando por ti desde el más hondo y oscuro poro
en que me has convertido la alcoba del alma.
vacilando ante el olvido y añorando tu presencia.
Inquietado por tus sueños,
desvelados por ese perfume del que tiñó mis aun incipientes canas.
Adaptándome a esta áspera libertad
no aun por mi lo suficiente deseada y apreciada
y suspirando por ti desde el más hondo y oscuro poro
en que me has convertido la alcoba del alma.
By: Anticronista Gutiérrez
jueves, 19 de abril de 2012
Atrapado
no desvistas mi amor
podrías encontrar un maniquí:
no desvistas el maniquí
podrías encontrar
mi amor.
hace mucho que ella
me ha olvidado.
se está probando un nuevo
sombrero
y parece más
coqueta
que nunca.
ella es una cría
y un maniquí
y muerte.
no puedo odiar
eso
ella no hizo
nada
fuera de lo normal.
yo sólo quería
que lo hiciera.
Charles Bukowski - Atrapado
La librería - Fragmento encontrado por ahí.
”LA LIBRERÍA”
Como asiduo lector que soy, supongo que como much@s de vosotr@s, siempre suelo acudir a mi Librería habitual. En éste caso en una Librería bastante amplia que dispone de muchos pasajes.
Hace tan sólo unos días acudí la Librería sin llevar una idea fija del libro que iba a escoger. Nada más entrar, como de costumbre, me percaté que la Librería estaba repleta de personas que, al igual que yo, son amantes de la lectura.
No siendo muy consciente del tiempo, fueron pasando las horas rebuscando entre novedades, temáticas, autores reconocidos, noveles, etc. Francamente, llegó un momento que me encontraba algo exhausto. Decidí dejar de buscar y aplazarlo para otro día… Cuando me encaminé hacia la salida, tras franquear varios atajos, no sé el por qué; algo extraño me indujo a ello , miré a un estante. Sobre el mismo, apilados, reposaban libros que, apoyándose los unos en los otros, lucían una nueva y galante encuadernación. Detenido frente aquel enorme escaparate de tímidas letras ocultas entre miles de páginas, mis ojos miraban de un lugar a otro escudriñando lo que parecía ser un muro reluciente de ladrillos perfectamente alineados.
Una sensación de mareo me hizo cerrar los ojos unos minutos mientras mis dedos los amasaban intentando paliar un ataviado cansancio.
-¿Se encuentra bien, señor? … musitó una voz tenue, a la par que noté una mano yacer sobre mi hombro .
-Sí… Disculpe, no se preocupe sólo es cansancio.
Retiré mi mano y abrí los ojos… mi agotamiento quedó ajado al instante.
-¿Dónde me encuentro?... pregunté mientras buscaba a la persona que unos segundos antes me había hablado … pero no hallé a nadie…
Miré a mi alrededor… percatándome de que me hallaba solo en una reducida Librería que sólo mostraba frente a mí un vetusto y derruido estante. Cientos de arcaicos libros se reunían amontonados sobre el suelo. Me arrodille justo frente aquel magno espectáculo de entrañables literatos. Asilé un libro entre mis manos con el propósito de ver el título que se expresaba en su corroído lomo. No podía creer lo que estaba viendo; en cuestión de segundos, sobre su lomo, su título se difuminaba para dar paso a otro. Perplejo, perdido en el tiempo, pude apreciar en su lomo intercambiarse cientos de títulos; todos ellos eran nombres y datas : (Ismael - XL) - (Andrea - VI) - (Michael - LXVI)… sin cesar… sin orden…
Por un momento dejé sosegar mi vista sobre aquella reunión de historias hiladas entre sí. En cada libro; lomo, acaecía justamente lo mismo… Quise dilucidar lo que estaba viendo, pero mi razón me encaminó a un único pensamiento a modo de pregunta; ¿aquí se halla la historia de todo ser humano?…
“EL LIBRO”
Sentado, apoyado sobre una desvestida pared que se hallaba tras de mí, volví a observar detenidamente el lomo de libro que pernoctaba entre mis manos, éste, revelaba un título que se había detenido perenne: (Manuel - XX)… Decidí abrir en Libro sin ser consciente, si quiera, en qué página irrumpiría… Al abrirlo, mi cuerpo comenzó a temblar… Ante mis ojos, pude leer cada paso dado el día que mi Hija nació… tras leerlo, todas las letras comenzaron a caer sobre mi cuerpo, paliándome el frío permutándolo en una calidad paz y dejando ambas páginas en blanco…
”PASAR PÁGINA”
Temeroso, comencé a pasar páginas apresurado hasta llegar al día de hoy… -Dios Santo!... no puede ser... pensé … Sobre ambas páginas, a medio escribir, con asombro pude ver que cada movimiento que hacía en ése instante, pensamientos, sentimientos… TODO… se redactaba por sí solo conforme se producía…
-¿Se encuentra bien señor? … musitó una voz tenue .
-¿Quién es usted…? esgrimí al viento .
-No tiene importancia quien soy señor. Lo ciertamente importante es, ¿Sabe quién es usted…?
-NO… ni me encuentro bien ni en éste instante soy capaz de saber quien soy… pero puedo pasar páginas y ver mi futuro… tal vez así llegue a comprender quien soy y para qué he venido a éste Mundo…
-Señor… todas ésas páginas están en blanco. Si vuelve a mirar su pasado, sólo podrá leerlo una vez, tras leer, las letras volverán a despeñarse sobre usted… Sólo puede quedarse en las páginas que tiene frente a usted; presente .
-¿No puedo pasa página… ?
-Constantemente está usted pasando páginas. Es usted el escritor que redacta cada palabra de su Libro, su historia; Vida … El pasado es su doctrina, quien le ha llevado a ser quien es en el presente, no debe releerlo pues éste ya se halla en usted… El futuro no es más que el próximo segundo que ha de venir… según como actúe cada segundo, será lo que deje lacrado en las innumerables páginas que aún le quedan por redactar… Como bien sabe toda historia tiene un fin… Cuando haya concluido SU LIBRO; VIDA , éste será la huella que dejará como recuerdo en los demás… Mientras perdure el recuerdo usted nunca partirá…
-¿Podría responderme a una pregunta?...
-Dígame, ¿Busca algún libro o autor en concreto?
-¿Cómo… Quién eres…? inquirí al oír una voz femenina .
-¿No me recuerdas? Trabajo aquí… te he ayudado en alguna ocasión a encontrar lo que buscabas… ¿Te puedo ayudar…?
Le miré fijamente a los ojos… Comencé a sonreír, ella, igualmente correspondió con una hermosa sonrisa…
-NO… aunque no me creas, no lo veas… hoy he hallado y me llevo la publicación que buscaba. Tal vez en otra ocasión… he de marcharme… GRACIAS!!
-¿Te encuentras bien?
... Solté una carcajada y me marché.......
De MJ.Bustelo
sábado, 14 de abril de 2012
viernes, 13 de abril de 2012
jueves, 12 de abril de 2012
Por qué te quiero en 65 palabras - Fragmento
Te quiero porque creo que entiendes como soy...
Te quiero porque a ti te puedo contar lo que a nadie le puedo contar...
Porque puedo sentir que mi vida a tu lado cobrará sentido y dejará de estar vacía...
Te quiero porque nunca nadie me ha hecho vibrar como cuando he estado a tu lado...
Porque me he llenado con tus silencios con un punto y final en tu sonrisa, y a veces con un beso
Te quiero porque te pienso, te imagino, te recuerdo y hasta 1000 veces al día te ensueño
Porque el calor de tu cuerpo me ha hecho olvidarme del invierno y descubrir este paraíso nuevo
Te quiero por como me haces sentir y vivir, y sin quererlo, añorado de tu falta, despierto en este caótico y sinsentido infierno.
Porque mis pulmones aborrecen el aire no embriagado con el aroma a despertar en tu piel, mi boca... la saliva sin tus besos y mis ojos están ciegos incapaces de captar luz alguna que no provenga de tu imagen o tu reflejo.
Porque creo que no encontraré a nadie tan grande en el mundo que sea capaz de llenar el agujero negro que has dejado en mi y que día a día me va absorbiendo.
Te quiero porque a ti te puedo contar lo que a nadie le puedo contar...
Porque puedo sentir que mi vida a tu lado cobrará sentido y dejará de estar vacía...
Te quiero porque nunca nadie me ha hecho vibrar como cuando he estado a tu lado...
Porque me he llenado con tus silencios con un punto y final en tu sonrisa, y a veces con un beso
Te quiero porque te pienso, te imagino, te recuerdo y hasta 1000 veces al día te ensueño
Porque el calor de tu cuerpo me ha hecho olvidarme del invierno y descubrir este paraíso nuevo
Te quiero por como me haces sentir y vivir, y sin quererlo, añorado de tu falta, despierto en este caótico y sinsentido infierno.
Porque mis pulmones aborrecen el aire no embriagado con el aroma a despertar en tu piel, mi boca... la saliva sin tus besos y mis ojos están ciegos incapaces de captar luz alguna que no provenga de tu imagen o tu reflejo.
Porque creo que no encontraré a nadie tan grande en el mundo que sea capaz de llenar el agujero negro que has dejado en mi y que día a día me va absorbiendo.
Negrita: Fragmento de la Película
Cursiva del Anticronista.
Soñandote en esta dulce locura que es ahora mi vida.
Me encanta soñar contigo. Es inevitable. Mis áridos labios, ya totalmente desérticos de tu rocio, no aspiran a más que volver a beber de tu boca antes de alcanzar el sueño eterno que nos separe ya por siempre.
Voy comprendiendo mejor cada día el mundo onírico. Si los sueños existen son para conformarnos con aquello que deseamos y perseguimos como la Luna a la Tierra, pero nunca alcanzamos. Peregrinos de una Tierra sin un templo ni un dios al que rendirle culto.
Te deseo. Y los deseos inalcanzables parecen ser también incesantes, constantes e incansables en su lucha por realizarse. Te deseo tanto que no existe mayor aspiración en mi vida que la casa de mis labios visite la fábrica de la pasión por ti inahugurada y que se empeña en mantener esta huelga de celo. Y como te deseo tanto, cada día que pasa muero por dos, porque un día sin verte es un día a medias, incompleto, y como vacío, sin sentido... Y en la locura de este deseo sería capaz de renunciar a todo cuanto poseo, el resto de mi vida sería un legado perfecto para las generaciones que nunca descenderán de mi, porque las puertas de mi castillo están cerradas a otra princesa que no seas tu.
Y en verdad es que no necesito mucho, soy como un camello que no necesita beber de tu amor más que alguna vez cada cierto tiempo, ya lo tengo asumido, he aceptado esta animal posición, sin ninguna resignación, y por mucho que los amos se empeñen, los animales están ahí para servirnos, y creo que en su pequeña conciencia no esperan más que un poco de comida y alguna caricia de vez en cuando, no tienen conciencia ni del mañana, ni del futuro, y simplemente viven disfrutando del momento.
Seguro que continuará...
Voy comprendiendo mejor cada día el mundo onírico. Si los sueños existen son para conformarnos con aquello que deseamos y perseguimos como la Luna a la Tierra, pero nunca alcanzamos. Peregrinos de una Tierra sin un templo ni un dios al que rendirle culto.
Te deseo. Y los deseos inalcanzables parecen ser también incesantes, constantes e incansables en su lucha por realizarse. Te deseo tanto que no existe mayor aspiración en mi vida que la casa de mis labios visite la fábrica de la pasión por ti inahugurada y que se empeña en mantener esta huelga de celo. Y como te deseo tanto, cada día que pasa muero por dos, porque un día sin verte es un día a medias, incompleto, y como vacío, sin sentido... Y en la locura de este deseo sería capaz de renunciar a todo cuanto poseo, el resto de mi vida sería un legado perfecto para las generaciones que nunca descenderán de mi, porque las puertas de mi castillo están cerradas a otra princesa que no seas tu.
Y en verdad es que no necesito mucho, soy como un camello que no necesita beber de tu amor más que alguna vez cada cierto tiempo, ya lo tengo asumido, he aceptado esta animal posición, sin ninguna resignación, y por mucho que los amos se empeñen, los animales están ahí para servirnos, y creo que en su pequeña conciencia no esperan más que un poco de comida y alguna caricia de vez en cuando, no tienen conciencia ni del mañana, ni del futuro, y simplemente viven disfrutando del momento.
Seguro que continuará...
miércoles, 4 de abril de 2012
Fragmentos de: La Soledad de los Números Primos
Los números primos sólo son exactamente divisibles por 1 y por sí mismos. Ocupan su sitio en la infinita serie de los números naturales y están, como todos los demás, emparedados entre dos números, aunque ellos más separados entre sí. Son números solitarios, sospechosos, y por eso encantaban a Mattia, que unas veces pensaba que en esa serie figuraban por error, como perlas ensartadas en un collar, y otras veces que también ellos querrían ser como los demás, números normales y corrientes, y que por alguna razón no podían. Esto último lo pensaba sobre todo por la noche, en ese estado previo al sueño en que la mente produce mil imágenes caóticas y es demasiado débil para engañarse a sí misma.
...el verdadero destino de los números primos es quedarse solos. Pero cuando, ya cansados de contar, nos disponemos a dejarlos, topamos de pronto con otros dos gemelos estrechamente unidos. Es convencimiento general entre los matemáticos que, por muy atrás que quede la última pareja, siempre acabará apareciendo otra, aunque hasta ese momento nadie pueda predecir dónde. Mattia pensaba que él y Alice eran eso, dos primos gemelos solos y perdidos, próximos pero nunca juntos. A ella no se lo había dicho. Cuando imaginaba confiándole cosas así, la fina capa de sudor que cubría sus manos se evaporaba y durante los siguientes diez minutos era incapaz de tocar nada...
...ella sentía que el peso de aquel cuerpo conjuraba todos sus miedos; porque, aunque no lo amaba, él amaba por los dos y eso los salvaba...
...Por primera vez sintió que la inmensa distancia que los separaba era insignificante. Estaba convencida de que él seguía en el mismo sitio, donde ya le había escrito algunas veces, muchos años antes. Si se hubiera casado, ella lo habría percibido de algún modo. Porque estaban unidos por un hilo invisible, oculto entre mil cosas de poca importancia, que sólo podía existir entre dos personas como ellos: dos soledades que se reconocían.
...el verdadero destino de los números primos es quedarse solos. Pero cuando, ya cansados de contar, nos disponemos a dejarlos, topamos de pronto con otros dos gemelos estrechamente unidos. Es convencimiento general entre los matemáticos que, por muy atrás que quede la última pareja, siempre acabará apareciendo otra, aunque hasta ese momento nadie pueda predecir dónde. Mattia pensaba que él y Alice eran eso, dos primos gemelos solos y perdidos, próximos pero nunca juntos. A ella no se lo había dicho. Cuando imaginaba confiándole cosas así, la fina capa de sudor que cubría sus manos se evaporaba y durante los siguientes diez minutos era incapaz de tocar nada...
...ella sentía que el peso de aquel cuerpo conjuraba todos sus miedos; porque, aunque no lo amaba, él amaba por los dos y eso los salvaba...
...Por primera vez sintió que la inmensa distancia que los separaba era insignificante. Estaba convencida de que él seguía en el mismo sitio, donde ya le había escrito algunas veces, muchos años antes. Si se hubiera casado, ella lo habría percibido de algún modo. Porque estaban unidos por un hilo invisible, oculto entre mil cosas de poca importancia, que sólo podía existir entre dos personas como ellos: dos soledades que se reconocían.
La Soledad de los Números Primos. Paolo Giordano (Narrativa Salamandra)
martes, 3 de abril de 2012
Humanidad Inerte
Últimamente me siento inerte, carente de vida y cuasi de sentimientos. Con paso firme me dejo arrastrar al vacío... vacío que a su vez, día tras día, como la gota que forma una caverna de estigmas, dejo sin querer que se vaya apoderando de todo.
Ya nada me preocupa, soy un mero espectador pasivo de esta realidad, ahí fuera no me quedan sueños que cumplir ni mundos que conquistar. Ni la despiadada tristeza puede hacer mella en la roca de mármol, inerte, en cuyo interior me encuentro. No me preocupa que esta sensación sea pasajera o me vaya a acompañar el resto de mi vida. Me he despojado de aquello que me humanizaba y sin ser consciente rehuyo de toda compañía.
Intento que mi mente continúe en el estado estéril en que se encuentra, evito pensar porque las ideas me duelen, ruedan los días como el caer de las hojas de un árbol ya marchito y yo sigo en mi sitio, vivo, pero inerte.
Todo lo que me rodea parece rezumar ese apestoso olor a derrota que inunda la vida. He abandonado a su suerte la carrera de los sentimientos que tan ilusionado comencé a estudiar cuando tomé consciencia de que me sentiría incompleto hasta encontrar la pieza de puzle que completase este rompecabezas de vida, sin caer en el detalle, de que muchas piezas son de cristal: frágiles y a su vez tan transparentes, que las ilusiones opacas a través de las que encajamos se desvanecerán algún día.
Y aquí se queda ese atisbo de sentimientos que luchan por entrar en mi sentir, pero que innegablemente nunca podrá franquear los gruesos vidrios que se han interpuesto entre mi yo y mi realidad. Adheridos quedarán a un papel impregnado de amarga tinta del color del desamor... por momentos inmutables... por momentos en el olvido... pero ligados a mi ser como electrones que orbitan incesantes al núcleo de mi átomo.
El tiempo es la única constante en mi universo, y no me preocupa si varía la duración de un segundo o se colapsa en el infinito de esta soledad. El tiempo será lo único que hará mella en mi "ya" si no desaparece el incansable parpadeo de tu recuerdo. No se puede llegar a caer más bajo en lo que a humanidad respecta. Muchas son las noches en que el subconsciente onírico toma el timón de mis sueños trayendo de nuevo su imagen a mi memoria en tantas situaciones que teníamos por vivir ahora abortadas por la razón de mi consciente. Esas noches despierto de un dulce sueño que se hace pesadilla al retornar a la realidad... respiro profundo... enjuago la tristeza en la permeable resignación, y regreso al mundo del abandonado ensueño, donde no consigo aun comprender el por qué, pero de nuevo me esperas tu. Y así durante la permanente vigilia de todas las noches. Siempre soñando contigo hasta el alba que es cuando despierto y duermo.
Ya nada me preocupa, soy un mero espectador pasivo de esta realidad, ahí fuera no me quedan sueños que cumplir ni mundos que conquistar. Ni la despiadada tristeza puede hacer mella en la roca de mármol, inerte, en cuyo interior me encuentro. No me preocupa que esta sensación sea pasajera o me vaya a acompañar el resto de mi vida. Me he despojado de aquello que me humanizaba y sin ser consciente rehuyo de toda compañía.
Intento que mi mente continúe en el estado estéril en que se encuentra, evito pensar porque las ideas me duelen, ruedan los días como el caer de las hojas de un árbol ya marchito y yo sigo en mi sitio, vivo, pero inerte.
Todo lo que me rodea parece rezumar ese apestoso olor a derrota que inunda la vida. He abandonado a su suerte la carrera de los sentimientos que tan ilusionado comencé a estudiar cuando tomé consciencia de que me sentiría incompleto hasta encontrar la pieza de puzle que completase este rompecabezas de vida, sin caer en el detalle, de que muchas piezas son de cristal: frágiles y a su vez tan transparentes, que las ilusiones opacas a través de las que encajamos se desvanecerán algún día.
Y aquí se queda ese atisbo de sentimientos que luchan por entrar en mi sentir, pero que innegablemente nunca podrá franquear los gruesos vidrios que se han interpuesto entre mi yo y mi realidad. Adheridos quedarán a un papel impregnado de amarga tinta del color del desamor... por momentos inmutables... por momentos en el olvido... pero ligados a mi ser como electrones que orbitan incesantes al núcleo de mi átomo.
El tiempo es la única constante en mi universo, y no me preocupa si varía la duración de un segundo o se colapsa en el infinito de esta soledad. El tiempo será lo único que hará mella en mi "ya" si no desaparece el incansable parpadeo de tu recuerdo. No se puede llegar a caer más bajo en lo que a humanidad respecta. Muchas son las noches en que el subconsciente onírico toma el timón de mis sueños trayendo de nuevo su imagen a mi memoria en tantas situaciones que teníamos por vivir ahora abortadas por la razón de mi consciente. Esas noches despierto de un dulce sueño que se hace pesadilla al retornar a la realidad... respiro profundo... enjuago la tristeza en la permeable resignación, y regreso al mundo del abandonado ensueño, donde no consigo aun comprender el por qué, pero de nuevo me esperas tu. Y así durante la permanente vigilia de todas las noches. Siempre soñando contigo hasta el alba que es cuando despierto y duermo.
Autor: Anticronista J.P
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